No sé por qué,
pero la mina vio en el tipo a alguien capaz de responder a sus preguntas sobre
ciertas cuestiones, por lo que en una reunión social en que lo conoció, le
preguntó:
-¿Vos creés que
sea posible ver el futuro?
-Sí, claro,
porque el tiempo no existe, por lo que quien ve el futuro no es más que alguien
que ve más allá del espacio en que se encuentra.
Tras varios
segundos de silencio, la mujer dijo:
-¿Cómo que el
tiempo no existe?
-Y sí; no
existe; la inexistencia del tiempo ya fue ampliamente tratada por el budismo,
el taoísmo e indirectamente, por los estoicos al plantear el determinismo;… Te
doy un ejemplo: imaginate que no pudieras ver en su totalidad un objeto por
tenerlo demasiado cerca -y tras sacar una birome de su bolsillo y acercarla a
los ojos de la mujer, prosiguió -; si a esta birome la tuvieras así de cerca de
tus ojos durante un largo espacio (digamos, un año) y después tu vista
automática y lentamente subiera unos centímetros, verías otra parte de la misma
unidad y paralelamente dejarías de ver la parte inferior que antes veías; si
después de otro año de ver esa parte tu vista volviera a subir unos
centímetros, pasaría lo mismo: verías otra parte de la misma unidad y dejarías
de ver la parte inferior que antes veías, y así sucesivamente; esa visión
limitada, no global del objeto, y progresivamente cambiante en su enfoque, te
llevaría a creer que el mismo va cambiando de forma, pero si lo alejaras de
tus ojos y lo vieras en su totalidad -entonces alejó la birome de ella -, te darías cuenta de que la birome siempre fue igual; los
cambios fueron nulos, existieron sólo en tu percepción porque eran una ilusión creada por tu incapacidad de ver
simultáneamente el todo del objeto;… tal vez lo mismo pase con el universo; tal
vez aquello que consideramos mutaciones, transformaciones, cambios propios del
paso del tiempo, no sean más que una ilusión creada por nuestra incapacidad de
ver en simultáneo el todo universal; si pudiéramos alejarnos del universo y lo
viéramos en su totalidad, tal vez nos daríamos cuenta de que el mismo siempre
fue igual: inmutable, inmodificable,
inamovible… ATEMPORAL;... TODO (pasado, presente y futuro) tiene lugar simultáneamente porque el tiempo no existe; lo que
llamamos pasado y futuro, no son más que las partes que no vemos de una unidad
que existe, existió y existirá siempre, y lo que llamamos presente es la parte
del todo que sí vemos; aquel que tiene una visión más amplia de las cosas, es
alguien capaz de ver lo que llamamos "futuro", y ese alguien somos todos en
determinadas circunstancias, como puede ser el estado de sueño, ya que durante
el mismo nuestra visión se amplía.
La mujer,
mientras lo miraba con curiosidad, le dijo:
-Entonces, si el
futuro ya existe, existe a su vez lo que llamamos "destino"; esto implicaría
aceptar que no tenemos manera de alterar nada;… No sé si me gusta esa creencia;
¿vos así lo creés?
El místico, tras
hacer una pausa, dijo:
-Sí… yo creo que
se equivocó el poeta ya que para mí, no se
hace camino al andar; el camino está ahí desde siempre y lo vamos
descubriendo de a poco;… Yo creo que todo está predeterminado y nuestra
libertad es una fantasía… Creo que somos como actores interpretando personajes
que no saben que lo son, y si los personajes de una obra tomaran conciencia de
que son cosa tal y llegaran hasta a rebelarse contra el autor, no sería ese un
signo de transgresión al destino ni de libertad de pensamiento ni de acción,
porque de todo eso ocurrir, sería porque el autor así lo dispuso… …Pero es sólo
mi opinión; puede ser que me equivoque.
Dado que su
interlocutor parecía tener un conocimiento importante de temas místicos, la
mujer le preguntó sobre el significado de un sueño que había tenido
repetidamente cuyo final en el último tiempo se había modificado para mal, ya
que se despertaba sobresaltada, pero en este caso no obtuvo una respuesta
concreta ya que el místico le dijo que si bien los sueños a veces significan
algo, en general no significan nada y no hay manera de saber cuándo los mismos
tienen un mensaje por descifrar y cuando no, por lo que podría ser que el suyo
indicara algo por ocurrir en lo que llamamos futuro e implicara una advertencia,
que es lo que ella creía, como podría ser que no fuera así.
La reunión
terminó y la mujer se fue a su casa.
El león
En las semanas
siguientes, la mujer volvió a tener el sueño que le había contado al místico de
la reunión pero siguió sin entenderlo hasta que un día de principios de la
década del 2000, un joven de unos veinte años se le acercó por la calle y le
dijo:
-Disculpe,
¿usted fue maestra jardinera del jardín "..."?
A lo que la
mujer respondió:
-Sí.
-¿Enseñaba
música?
-¿Por qué quiere saber?... ¿Quién es usted?
-Responda, por
favor.
Tras unos
segundos, la mujer dijo:
-Sí, enseñaba
música.
-¿Trabajó a mediados de los ochenta?
La mujer no respondió,
entonces el joven supo que el silencio equivalía a un "sí"
Maltratadora
Algún día el
yunque, cansado de ser yunque,
pasará a ser
martillo. (Bakunin)
La mujer, en su
trabajo de maestra jardinera, había sido muy maltratadora; su impiedad habría
sido insignificante de haber tenido como objetivo a personas adultas, pero
cuando uno es muy chico, un maltrato físico menor como ser, un tirón de orejas
acompañado de reprobaciones, es necesariamente muy humillante y deja marcas en
el cuerpo emocional que no se van así nomás, y ella las infligía corrientemente
a sus alumnos entre los que se encontraba el agresor que le causó la muerte.
Lo no interpretado
El sueño repetido
que la mujer le había contado al místico en la reunión, es el siguiente: ella
estaba en una jaula con leones cachorros y tenía un látigo que azotaba contra
el suelo manteniendo así a esas criaturas poderosas en un estado continuo de sumisión, por lo que ella misma se sentía poderosa, y mucho más cuando
concretaba sus amenazas de azotes al infligirlos sobre los leones (no
advirtiendo en ningún momento que el poder de hacer daño es en realidad,
debilidad), pero un día empezó a soñar que un león adulto aparecía y se le
aproximaba; ella lo azotaba con el látigo pero eso no disuadía al animal que
terminaba lanzándosele encima y asesinándola.
Tal vez los
deterministas se equivoquen y el futuro sí está en construcción en el presente,
por lo que quizás los sueños que la mujer tuvo, tuvieran como objetivo hacerla
replantearse el trato que le dio a sus alumnos; de haberlo hecho y haber
sentido culpa de haber empuñado y usado el látigo, tal vez nunca habría soñado
al león adulto ni habría aparecido en la vigilia su equivalente humano, ya que
cuando existe un sentir de culpa tras realizarse una mala acción, el universo
concede perdón a quien se ha conducido mal y libera de malestar a la víctima de
su mala obra, pero cuando el mismo es nulo, también lo es la ausencia de
consecuencias.
El simbolismo
del sueño debería haber sido claro para la mujer, sin embargo, ella nunca lo
supo interpretar.